jueves, 25 de junio de 2015

Terapia de inducción del colágeno con microagujas (Microneedling)

La terapia de inducción del colágeno con microagujas (microneedling) es una técnica relativamente reciente, cuyo uso se ha generalizado desde hace unos 5 años. Consiste la penetración de pequeñas agujas a nivel de la piel, que miden entre 0,5 y 3mm (dependiendo de la zona a tratar), logrando dos objetivos: 
1. Por un lado, crear pequeños canales para que penetren los principios activos que nos interesen (ácido hialurónico, vitamina C...) con efecto antiarrugas, iluminador y tensor. 
2. Por otro lado, estimular la formación de colágeno y elastina que de forma natural se encuentran en nuestra piel, ayudando a recuperar elasticidad y firmeza. 
Con estas acciones, es un tratamiento útil en múltiples problemas dermatológicos: mejora cicatrices de acné, poros dilatados, arrugas finas, patas de gallo, estrías y celulitis. 
Actualmente existen dos tipos de dispositivos: 
a) Los dispositivos manuales (en forma de rodillos o roller) que precisan un mayor tiempo de tratamiento y un mayor número de sesiones, además de provocar ligeras molestias al paso del mismo (aunque en general son bien toleradas). Permiten un uso amplio de longitudes de las agujas (hasta 3mm) lo que facilita tratamiento de zonas corporales con mayor panículo adiposo.
b) Los dispositivos eléctricos (en forma de pistola) cuyos resultados son más rápidos, precisan menos tiempo y un menor número de sesiones y son menos molestos debido a que el sistema vibra y esto que disminuye la sensación de dolor.
Lo recomendable es que si se maneja este tipo de tecnología el profesional disponga de ambas opciones para poder elegir, según patología y zona a tratar, el mejor sistema en cada paciente.
El tiempo de recuperación es muy rápido en ambos casos. No precisa días de descanso en casa y el único efecto adverso es la aparición de rojez en la zona de aplicación que dura 1 o 2 días y que puede disimularse con maquillaje corrector.
Es un tratamiento mínimamente invasivo, pero que debe realizarse por un dermatólogo, dado que existe el riesgo de que utilizando un sistema no adecuado o no realizándolo correctamente se produzcan infecciones o efectos no deseados.

"El Dermatólogo es el especialista que mejor conoce tu piel. Consúltale tus dudas"